En este domingo cuarto del Tiempo Ordinario, al coincidir con el día dos de febrero, se celebra la Fiesta de la Presentación de Jesús en el Templo. Es una fiesta con una gran tradición popular, y aunque es esencialmente cristológica, tiene sus connotaciones marianas. En muchos lugares se celebran las Candelas que aplicado a Maria es la Virgen de las Candelas o la Candelaria.
Esta Fiesta de la presentación tiene aún un cierto sabor a la Navidad. Jesús se nos ha presentado en forma de Niño como el “Dios con nosotros”. Se manifestó en la cueva de Belén a los pastores y fueron testigos sus padres María y José. Más tarde se sigue manifestando a los Reyes Magos, implicando para poder encontrarlo, a los entendidos de Israel. Este hecho ya da señales de inquietud a los poderosos.
Al parecer el Evangelista Lucas siente la necesidad de presentarnos otra manifestación importante para el futuro de lo que será este Niño. Lo saca del anonimato al presentarlo en el Templo de Jerusalén como el Mesías enviado por Dios. Lo hace, no ante los dirigentes religiosos, sino ante dos personas ancianas, Simeón y Ana, prototipo de la “fe de los sencillos”. Este tipo de “fe sencilla” les hace tener un corazón abierto a los designios de Dios para con su pueblo y toda la humanidad. Nos representan a todo hombre y mujer de cualquier tiempo y lugar, que viven su fe con sencillez y tienen un corazón abierto para la acogida de Dios y que repercute también para saber acoger a los hermanos.
Este es el primer paso para evangelizar y, en este Año Jubilar, caminar hacia una “esperanza que no defrauda” (Texto Dominicos)
Comienzo de la Predicación de Jesús - Lucas 4, 14-21
En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea, con la fuerza del Espíritu, y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas y todos lo alababan. Fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: "El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos la vista. Para dar la libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor". Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba, y se sentó. Toda la sinagoga tenía puestos los ojos en él. Y él se puso a decirles: - Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.
Explicación
Después de bautizarse en el río Jordán, Jesús regresa a Nazaret y comienza una nueva etapa de su vida, a la que da un carácter más abierto y público. En la sinagoga de su pueblo, después de leer un pasaje del Profeta Isaías, que anuncia la libertad para los que viven como en una cárcel por la ceguera, por la rabia contra los otros, por la pobreza o por la violencia, Jesús dice que para eso ha venido él, y que con la fuerza de Dios, llevará a cabo el encargo que su Padre le ha hecho: dedicar su vida a hacer el bien y a ayudar a los demás.
Evangelio dialogado
Lucas: Muchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos ocurridos entre nosotros cuando vivía Jesús.
Niño1: Lucas, pero a mí me han dicho que tú no eras de los discípulos que él llamó en el monte.
Niño2: ¿Cómo puedes tú hablarnos de lo que hacía Jesús, si no lo viste?
Lucas: Siguiendo las tradiciones transmitidas por los que primero fueron testigos oculares y luego predicadores de la Palabra de Jesús.
Niño1: Te refieres a los Apóstoles, porque ellos sí vieron a Jesús.
Lucas: Así es. Pero no me contenté con lo que oía, sino que me puse a comprobarlo todo exactamente desde el principio.
Niño2: Vamos, que dejas claro que trabajaste a conciencia. Lucas: Luego, resolví escribirlo todo por su orden, para que conozcáis la solidez de las enseñanzas que he recibido.
Niño1: ¡Vale! Oye Lucas, cuéntanos. ¿Qué ocurrió después de las bodas de Caná?
Lucas: Jesús volvió a Galilea. Ya su fama se había extendido por toda la comarca. Entraba en las sinagogas y todos lo alababan por sus enseñanzas y los signos que hacía.
Niño2: ¿Y también predicaba Jesús en su pueblo?
Lucas: Sí, en aquellos días también fue a Nazaret, donde se había criado. Y como aquel día era Sábado, fue con la gente de su pueblo a rezar a la sinagoga, como siempre lo había hecho cuando vivía allí.
Escuchad:
Judío: Jesús, ¿quieres tú leer hoy la escritura de los Profetas?
Jesús: Está bien. Lectura del Profeta Isaías: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista. Para dar libertad a los oprimidos, para anunciar el año de gracia del Señor”.
Lucas: Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba, y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y Jesús se puso a decirles:
Jesús: Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.
Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández
En aquel tiempo había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí; Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda. Faltó el vino, y la madre de Jesús le dijo: - No les queda vino. Jesús le contestó: - Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora. Su madre dijo a los sirvientes: - Haced lo que él diga. Había allí colocadas seis tinajas de piedra, para las purificaciones de los judíos, de unos cien litros cada una. Jesús les dijo: - Llenad las tinajas de agua. Y las llenaron hasta arriba. Entonces les mandó: - Sacad ahora, y llevádselo al mayordomo. Ellos se lo llevaron. El mayordomo probó el agua convertida en vino sin saber de dónde venía (los sirvientes sí lo sabían, pues habían sacado el agua), y entonces llamó al novio y le dijo: - Todo el mundo pone primero el vino bueno y cuando ya están bebidos, el peor; tú, en cambio, has guardado el vino bueno hasta ahora. Así, en Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria y creció la fe de sus discípulos en él. Después bajo a Cafarnaún con su madre y sus hermanos y sus discípulos, pero no se quedaron allí muchos días
Explicación
El relato presenta a Jesús y su madre participando en una fiesta de bodas, en un pueblecito llamado Caná. En medio de los convidados, ellos están atentos a lo que ocurre, y María siente que se acaba el vino. Y pidió ayuda a Jesús que, con alguna resistencia, acabó por hacer un signo admirable: a la entrada del banquete había unas tinajas llenas de agua, para que los que iban a comer cumplieran con la ley que manda lavarse las manos y de este modo la comida resulte una acción llena de pureza. Pues Jesús cambio el agua de las tinajas en un vino de mucha calidad. Y con este signo quiso darse a conocer como quien trasforma en alegría de fiesta, la seriedad de la ley.
Evangelio dialogado
Segundo domingo tiempo ordinario-C- (Jn 2,1-12)
Narrador: En aquel tiempo había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí, Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda.
NIÑO1: ¿Y qué tiene que ver una boda con Jesús?
NIÑO2: Pues yo pienso que si invitaron a Jesús hizo bien en acudir; además, ¿no has oído que estaba también su madre?
NIÑO1: Sí, y los discípulos, que eran doce. ¡Vaya gasto para los novios!
Narrador: Tenéis razón. Era costumbre invitar a todos los parientes y amigos, y las celebraciones duraban varios días. Los invitados comían, bebían, bailaban...
NIÑO2: ¿Jesús también? Yo no me lo imagino.
Narrador: Desde luego que sí; le gustaba ver feliz a los demás y participar en su alegría. Pero, pasados los primeros días surgió un problema.
NIÑO1: Ya me lo imagino. Con tanta gente, seguro que se terminó la comida.
NIÑO2: ¡Vaya corte! Eso sí que sería demasiado.
Narrador: Sí. Los novios no tenían mucho dinero, y el vino, que solía beberse en abundancia, comenzó a escasear. Escuchad lo que dijo el criado:
CRIADO: Nos estamos quedando sin vino, y la gente sigue pidiendo. ¡Más vino, queremos más vino!
MARÍA: Jesús, hijo, no les queda vino.
JESÚS: Tranquila, mujer; nosotros somos invitados. ¡Qué nos importa a ti y a mí! Mira, todavía no ha llegado la hora de manifestarme.
MARÍA: Vosotros, los que servís la mesa. Haced lo que Él os diga.
JESÚS: ¿Tenéis tinajas grandes?
CRIADO: Sí, tenemos seis tinajas que son para las purificaciones. En ellas caben lo menos cien litros de agua.
JESÚS: Está bien. Id y llenadlas de agua hasta el borde. Una vez llenas, lleváis un vaso al mayordomo para que lo pruebe.
Narrador: El mayordomo probó luego del vaso, lo paladeó apreciando el contenido, y se fue en busca del novio.
Mayordomo: Todo el mundo pone primero el vino bueno y deja el malo para el final, cuando todos están ya bebidos.
NOVIO: ¡Claro!, así debe ser.
Mayordomo: Entonces, no entiendo por qué mandas tú sacar ahora el vino mejor.
NOVIO: ¿Yo...? ¡No entiendo nada! Si no debía quedar más vino...
Narrador: Y así fue, cómo en Caná de Galilea, Jesús comenzó sus signos. Así manifestó su gloria y creció la fe de sus discípulos. Creyeron más en Jesús. Después bajó a Cafarnaún con su madre y sus discípulos. Pero no se quedaron allí muchos días.
Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández
En aquel tiempo, el pueblo estaba en expectación y todos se preguntaban si no sería Juan el Mesías; él tomó la palabra y dijo a todos: -Yo os bautizo con agua; pero viene el que puede más que yo, y no merezco desatarle la correa de sus sandalias. El os bautizará con Espíritu Santo y fuego. En un bautismo general, Jesús también se bautizó. Y, mientras oraba, se abrió el cielo, bajó el Espíritu Santo sobre él en forma de paloma, y vino una voz del cielo: -Tú eres mi Hijo, el amado, el predilecto
Explicación
Hoy damos un salto enorme para pasar de celebrar a Jesús niño a Jesús adulto. Ayer recordábamos a Jesús en brazos de su madre, reconocido como Rey por unos sabios de Oriente, y hoy le tenemos delante con treinta años, en el río Jordán, para que su primo Juan le bautice. Quienes estaban con Jesús en su Bautismo, le acogieron como el Hijo preferido de Dios, a quien podían conocer y querer Dice el evangelio que una voz, la voz de Dios que habla al corazón de sus hijos, así lo hizo saber : ¡Este es mi Hijo querido, escuchadle!
Este curso 2024/2025, el grupo intercentros “teaTEAMnos”va a continuar trabajando conjuntamente la
conviencia en sus centros, esta vez bajo la temática de la música. El proyecto se titula SUENA LA PAZ, dando
continuidad a la idea del año anterior de seguir soñando por una planeta de Paz. En este proyecto, cada centro
educativo representará un instrumento. En esta orquesta de paz, los instrumentos tienen diferentes modos de
sonar y diferentes paztituras (partituras), pero el objetivo siempre será formar armonías de esperanza, solidaridad y
amistad.
El proyecto va acompañado por un cuento motivador y una canción.
- Canción “Suena La Paz”: https://youtu.be/R4kH-7eS8zQ?feature=shared
En el siguiente enlace puedes descargar mucho más material que iremos compartiendo desde el equipo
intercentros “teaTEAMnos”: https://sites.google.com/view/somos-de-la-paz/inicio
La Iglesia Parroquial San Pedro Apóstol de Binéfar está dedicada a San Pedro, el apóstol de Jesús. Conoceremos un poco más la historia de este apóstol a través de la representación de su vida en retablo del altar mayor y en las vidrieras del templo. Pedro es el primero que Jesús llama y lo nombra "roca, piedra" sobre la cual construirá su Iglesia. Pedro es el primer Papa ya que recibió la suprema potestad pontificia del mismo Jesús. A Pedro se le representa con dos llaves en la mano, como llaves del cielo y su festividad se celebra el 29 de junio.